Por medio del correo electrónico he recibido el mensaje que el Alcalde de la ciudad de Guatemala, Álvaro Arzú Irigoyen, dirige a los vecinos para explicar su posición en la controversia que ha surgido con el gobierno de la República como consecuencia de la actitud de los empresarios del transporte pesado al negarse a acatar la disposición del Concejo Municipal capitalino de regular el horario en el que pueden circular por las calles de la capital para limitar que lo hagan durante las horas pico de tránsito y la intervención a todas luces inconstitucional del gobierno del presidente Óscar Berger, en general, y de la ministra de Gobernación, señora Adela de Torrebiarte, en particular, al decretar arbitrariamente el “traspaso” al Departamento de Tránsito de la Policía Nacional Civil que depende de ese ministerio, la autoridad para reglamentar el tránsito, lo que legalmente le corresponde a la Municipalidad autónoma, de acuerdo al Código Municipal. Razón por la cual el Alcalde Arzú ha presentado a la Corte de Constitucionalidad un recurso de inconstitucionalidad que deberá ser resuelto dentro del plazo legal.
Por considerarlo de mucho interés reproduzco a continuación el correo electrónico que recibí y les invito a que presionen sobre la flecha para que puedan ver y escuchar el mensaje a los vecinos del Alcalde Álvaro Arzú. Todo lo que se tiene que hacer es presionar sobre la flecha. El correo que recibí dice así:
“Amigos,
Los invito a ver un nuevo video que está en Youtube. En un mesaje, el Alcalde capitalino Álvaro Arzú habla sobre las tergiversaciones que se han venido dando debido a la medida impuesta por la Municipalidad capitalina, para limitar el ingreso del transporte pesado en las horas pico, una medida que se aplica en todas las ciudades grandes del mundo, siendo Guatemala una de ellas.
Compártanlo con sus amigos y familiares, para verlo, haga clic aquí o copie el enlace en su navegadora.
[youtube]zJQvbHF8n78[/youtube]
Abajo de este mensaje dejaron espacio para publicar unos comentarios que han hecho unas personas que están de acuerdo con la medida de las autoridades municipales de limitar a 16 horas, de las 24 que tiene el día, al tránsito de los vehículos de transporte pesado, aunque también hay comentarios de ciertas personas anónimas que, como ocurre siempre en nuestro país, lamentablemente, aprovechan para exponer su mala educación y cobardía para insultar a las personas que envidian y odian, como es el caso del ex Presidente de la República. Es obvio que esas personas no le tienen respeto, ni mucho menos simpatía y le odian, ya sea por motivos políticos, o porque son empresarios o choferes de vehículos de transporte pesado, o por el simple hecho de que Árzú es rubio y de ojos azules, un hombre distinguido y exitoso, y lo rechazan como si él fuera Tonatiú. No voy a reproducir esas diatribas anónimas y cobardes para no servir de caja de resonancia de esos vituperios.
Pero nadie puede dejar de reconocer que el Alcalde Arzú con su eficiente equipo de colaboradores han logrado mantener limpia la ciudad y poner orden en el tránsito, con buena señalización y semáforos que funcionan adecuadamente y al impedir que los conductores de vehículos se estacionen donde no deben porque saben que si lo hacen se exponen a que EMETRA y la eficaz Policía Municipal de Tránsito (PMT) les ponga un cepo y les haga pagar una multa.
Por otra parte, es preciso reconocer que es sumamente inconveniente el tránsito de vehículos del transporte pesado por las calles de la ciudad durante las horas pico, no sólo porque son un obstáculo para el tránsito de los automóviles, lo cual significa el gasto inútil de combustible y la pérdida de tiempo, sino también son un peligro para la población. Además, tampoco se puede negar que hay algunos choferes de vehículos de transporte pesado, tanto camiones como camionetas extraurbanas, que son unos irresponsables, patanes hijos de la china Hilaria, que andan corriendo por las calles y son un permanente peligro para los automovilistas y transeúntes.
En resumidas cuentas, insisto en que tiene razón el Alcalde Álvaro Arzú cuando se opone con todos los recursos legales a su alcance, incluyendo desde luego el esperado dictamen de la Corte de Constitucionalidad, a que el gobierno central viole la autonomía municipal que garantizan la Constitución de la República y el Código Municipal.
