Muchas veces se ha dicho que no se debe desprestigiar a una institución por las faltas o los errores que cometan algunos de sus integrantes, pero hay ciertos casos, como los que hoy me ocupan, en los cuales los culpables de la mala imagen que se están haciendo son los propios miembros de un organismo del Estado que jamás debería hacer nada que pueda desprestigiarle en lo más mínimo, porque ellos deberían ser los primeros en velar por mantener en alto su prestigio. Me refiero a lo que está ocurriendo durante estos días en el Organismo Judicial (OJ) y Corte Suprema de Justicia (CSJ), donde los trece magistrados todavía no se han podido poner de acuerdo para alcanzar la mayoría de las dos terceras partes de los votos favorables (o sea 9) y cumplir con lo que estipula la Constitución de la República en su artículo 215 de elegir cada año a un nuevo presidente.
Aunque parezca increíble, a pesar de que los magistrados ya han celebrado siete rondas de votaciones (7), todavía no se han podido poner de acuerdo y obtener un resultado positivo, porque hasta la fecha han sido solamente 7 los votos que ha sacado uno de los candidatos y se necesitan 9 para ser electo. Pero, evidentemente, los magistrados no tienen mucho interés en elegir al sucesor del actual presidente porque están muy tranquilos desde que, hace dos años, los magistrados de la Corte de Constitucionalidad (CC) se sacaron de la manga como si fueran magos una resolución caprichosa para que cuando no se haya podido llegar a elegir al nuevo presidente, asuma de oficio la presidencia el Vocal Primero. ¿De dónde sacaron esta resolución? El único antecedente que había sobre el particular es que, en vista de que no existe un reglamento interno que norme el procedimiento para la elección, consultaron a los magistrados de la CC y estos encontraron la salida cómoda de valerse de la disposición que dice que, en una votación, en ausencia del presidente corresponde votar al Vocal Primero. Pero en ninguna parte dice que cuando no se haya podido elegir al presidente, el vocal primero debe asumir las funciones presidenciales. Lo único que dice, repito, es que en una votación, cuando esté ausente temporalmente el presidente, el vocal primero debe votar por él, pero no dice, repito, que éste debe desempeñar las funciones presidenciales.
Aunque esto ya es en sí suficientemente lamentable, el colmo ha sido que en la última votación uno de los magistrados votó nulo, lo cual me parece francamente inconcebible. ¿Cómo es posible que un magistrado de la CSJ sea capaz de votar nulo? Tengo entendido que ese voto fue del Magistrado Augusto Eleazar López Rodríguez, porque está disgustado con sus colegas que no le apoyaron en un proyecto y por eso hizo el caprichito de votar nulo. ¡Qué poca vergüenza! ¡Todo un Magistrado de la CSJ con caprichitos! Repito que no me explico cómo pudo votar nulo un magistrado de la CSJ que debería estar consciente de que siempre debe dar valor a su voto.
Pero en vista del fracaso de la séptima votación, se convocó para reunirse a votar de nuevo mañana, domingo 12, por la noche. Y si esta vez uno de los candidatos logra obtener los 9 votos que necesita, y finalmente se elige al próximo presidente, todavía se estaría a tiempo para que éste tome posesión el próximo lunes 13, de acuerdo con el período que empalma con el mandato del anterior.
El Organismo Juidicial y Corte Suprema de Justicia están integrados actualmente por los siguientes destacados profesionales del Derecho:
Oscar Humberto Vásquez Oliva, Magistrado Vocal Noveno y Presidente; Rubén Eliú Higueros Girón, Magistrado Vocal primero; Luis Fernández Molina, Magistrado Vocal Segundo; Augusto Eleazar López Rodríguez, Magistrado Vocal Tercero; Beatriz Ofelia Deleón de Barrera, Magistrada Vocal Cuarta; Carlos Gilberto Chacón Torrebiarte, Magistrado Vocal Quinto; Edgar Raúl Pacay Yalibat, Magistrado Vocal Sexto; Jorge Gonzalo Cabrera Hurtarte, Magistrado Vocal Séptimo; Víctor Manuel Rivera Wolke, Vocal Octavo; Leticia Stella Secaira Pinto, Magistrado Vocal Décimo; Carlos de Leon Córdova, Magistrado Vocal Décimo, primero; Vladimimir Osman Aguilar Contreras, Magistrado Vocal Duodécimo; y José Francisco de Mata Vela, Magistrado Vocal Décimo Tercero.
Ojalá que mañana, en la octaba votación que se llevará a cabo, sí logren ponerse de acuerdo y nueve de ellos voten en favor de uno de los dos candidatos en competencia. Creo que es lo menos que se puede esperar de quienes deben ser los primeros en velar porque el pueblo guarde el debido respeto por el Organismo Judicial. Que de una vez por todas se decidan ya sea por el Magistrado Vocal Décimo Tercero, Francisco de Mata Vela, el candidato que tengo entendido están apoyando algunos miembros de los otros dos organismos del Estado; o bien por el Magistrado Vocal Segundo, Luis Fernández Molina, quien, según parece, no está recibiendo apoyo de ninguna clase del Presidente de la República, ingeniero Álvaro Colom Caballeros y de su poderosa esposa, Sandra Torres Casanova de Colom, ni tampoco de ninguno de los diputados del Congreso de la República y por eso mismo, entre otras cosas, su posición me parece la más independiente y positiva. Pero que ya no demoren más tiempo y se decidan mañana por alguno de estos dos magistrados para que el lunes pueda asumir el cargo. ¡Que no frieguen! Que ya no le den más largas al asunto.
Otros casos en entredicho
Otros casos que, lamentablemente, también ponen en grave entredicho a los trece magistrados del OJ y la CSJ son los que están pendientes de resolución desde hace largo tiempo contra los ex presidentes de la Junta Directiva del Organismo Legislativo y Asamblea Nacional, Rubén Darío Morales Véliz y Dr. Arturo Eduardo Meyer Maldonado por la indebida “inversión” en la casa de valores Mercado de Futuros (MDF), el primero de Q16 millones y el segundo de Q82.8 millones. ¿Cómo es posible que hasta este momento todavía no han podido decidir si van a quitarles el derecho a antejuicio a esos dos diputados sinvergüenzas para enjuiciarlos y hacerles pagar por lo que hicieron? ¡No jodan!
No en vano el pueblo ya está sospechando que en estos dos casos pueda haber mano peluda. ¿No le parece? ¿Usted qué cree?
Otro caso que verdaderamente llora sangre es el del ridículo monto de la fianza que le impuso el juez Quinto de Instancia Penal, Julio Jerónimo Xitimul, como medida sustitutiva al desprestigiado ex presidente de la República, Alfonso Portillo Cabrera (alias “Pollo Ronco”), quien no satisfecho con todo lo que ocurrió durante los cuatro años de su nefasto período de gobierno, ha regresado al país para burlarse de la justicia y de los guatemaltecos.
Sin embargo, cuando se roba una gallina un pobre que no tiene esos “agarres” políticos, ni grandes recursos económicos, con toda seguridad va a parar a la cárcel. Y a un compatriota agricultor de apellido Pivaral, que está enjuiciado solo porque se le olvidó que llevaba un revólver en su automóvil cuando cruzó la frontera con México, el juez que en mala hora le tocó ni siquiera ha tenido a bien oír su caso, y sin darle explicaciones le ha venido posponiendo las audiencias, pero, mientras tanto, desde hace varios meses le mantiene preso en la cárcel preventiva de la zona 18, lo cual, francamenteme -perdóneseme la expresión escatológica-, me parece una cabronada. ¡Qué poca madre!