Cerrará sus puertas el sábado 31 del mes en curso.
Carlos (?Charlie?) Meléndez Amado es lo que en francés se llama un gourmet, porque tiene el refinamiento de saber comer bien y, además, es un excelente cocinero que goza cuando ve que sus comensales son gourmands (que comen mucho) de lo que él prepara. Y, como a todos los que somos buenos cocineros y generosos anfitriones con los amigos ?entre quienes me cuento yo porque también cocino bien y me agrada invitar a mis amigos-, siempre hay alguien que invariablemente nos pregunta alguna vez por qué no abrimos un restaurante. No comprenden que es diferente cocinar para uno mismo, con los mejores ingredientes que se pueden encontrar, que hacerlo comercialmente para una clientela que no siempre los paga sin protestar. Pero ?Charlie? cayó en la tentación de hacerles caso y un día decidió que iba a abrir un restaurante de primera calidad internacional en la ciudad de Guatemala y para ello construyó unas instalaciones adecuadas en un amplio predio de la zona 10 donde hay bastante espacio para el estacionamiento de los vehículos de la clientela.
Frente del Museo-Teatro de Dalí en Pubol, Cataluña
En la parte superior se pueden ver los huevos que hay como decoración, los cuales fueron reproducidos en el restaurante Dalí de la ciudad de Guatemala.
Entrada del Museo-Teatro de Dalí en Pubol.
Obsérvense que las decoraciones fueron copiadas en el restaurante Dalí de la ciudad de Guatemala, pero de este detalle fueron muy pocos quienes se percataron de ello. No cabe duda de que “Charlie” Meléndez se esforzó en dar a la ciudad de Guatemala una buena réplica del original que está en Pubol, población de Cataluña, España.
Y en vista de que desde hace mucho tiempo ha sido un admirador del famoso y excéntrico pintor, escritor, escultor, diseñador y cineasta catalán Salvador Dalí, quien nació en Figueras, Gerona, Cataluña (España) el 11 de mayo de 1904 y falleció en una casa vecina al Museo-Teatro que lleva su nombre en la población de Pubol, el 23 de enero de 1989, a los 85 años de edad, decidió ponerle su nombre a manera de homenaje. Y para que se hiciera cargo de la cocina contrató los servicios del Chef Pedro Arceyut, oriundo de Costa Rica pero ha vivido en Guatemala desde que era estudiante, antes de irse a una academia de cocina en West Palm Beach, donde entró a trabajar al servicio de un millonario que le conectó con los dueños del fabuloso hotel Burj-al-Arab de Dubai, donde trabajó por algún tiempo. Después fue contratado para trabajar en el hotel Four Seasons de Guanacaste, Costa Rica, pero vino de visita a Guatemala con su esposa Ana y ?Charlie? aprovechó para contratar sus servicios como Chef del Dalí. Y a partir del día de la inauguración, el 4 de julio del 2006, y desde entonces, ha venido dando deliciosos placeres gastronómicos a la clientela con los platos de su especialidad.
El excéntrico artista surrealista Salvador Domingo Felipe Jacinto Dalí i Domènech, Marqués de Pubol, conocido en todo el mundo como Salvador Dalí.
Pero un restaurante como éste debe estar permanentemente al cuidado del ojo del amo por lo que ?Charlie? Meléndez tuvo que dedicar los días y las noches casi por completo a atenderlo, no sólo por su conocimiento como gourmet, sino también porque sus numerosos clientes eran sus amigos que esperaban ser atendidos personalmente por él para que les sugiriera qué comer y qué vinos escoger, porque confían en que él sabe de ambas cosas. Y a pesar de que el negocio fue un éxito, al cabo de casi dos años consecutivos de dedicar todo su tiempo a atenderlo fue suficiente para que ?Charlie? comprendiera que es demasiado el tiempo que se tiene que dedicar a ese negocio para atenderlo como es debido, tiempo que antes podía dedicar a estar al lado de su amada esposa, de sus hijos y del resto de su familia y de sus amigos, así como a atender sus otras actividades.
Para meditar sobre lo que debía hacer, hace algunos días emprendió un viaje de carácter gastronómico por varios países de Europa y las islas griegas, en el mar Egeo, acompañado de su esposa, Anabella, y de varios matrimonios amigos. Como resultado de este período de recreo y meditación, al regresar a Guatemala decidió que prefería optar por dedicar más tiempo a su familia, a sus amigos y a otros negocios, en vez de tener que pasarse los días y las noches atendiendo su restaurante. Y sin pensarlo mucho, de inmediato envió miles de mensajes por correo electrónico con el lacónico mensaje que dice lo siguiente:
“A nuestros estimados Clientes y Amigos: debo informarles que Restaurante Dalí ha tomado la decisión de cerrar sus operaciones definitivamente el 31 de mayo de 2008. Por este medio quiero agradecer a todas la personas que nos acompañaron, nos apoyaron y compartieron con nosotros este maravilloso tiempo”.
Naturalmente, las numerosas respuestas no se hicieron esperar lamentando la firme decisión del Restaurante Dalí de cerrar sus puertas definitivamente el próximo sábado 31. Pero “Charlie” dice que no se arrepiente, porque le queda la satisfacción de haber cumplido ese deseo que tuvo durante muchos años y que se siente feliz de haber tenido la experiencia de haber podido atender a toda la clientela y en especial a sus amigos.
Muchas gracias al estimado amigo “Charlie” Meléndez Amado, al magnífico Chef Pedro Arceyut y a todos los meseros y demás personal que atendieron espléndidamente a los clientes durante estos dos años. También para los clientes fue ésta una muy grata experiencia que recordaremos con satisfacción.