Una disculpa

Presento mi cordial saludo a mis lectores y una disculpa por no haber publicado mi acostumbrada página web, pero regresé ayer por la tarde ?a bordo de un amplio y cómodo Air Bus de TACA por supuesto- y, sinceramente, estoy demasiado cansado para ponerme a escribir esta noche. Como ustedes saben, en estos cortos viajes ?de descanso? lo que menos se hace es descansar porque hay mucho que hacer, generalmente se camina más de lo habitual y, en consecuencia, al regresar a la actividad normal es necesario descansar un rato para reponerse del ?descanso?. Además, en la ciudad de México desarrollamos una cerrada agenda de actividades y para ajuste estaba haciendo demasiado calor y todo eso contribuye al cansancio. Pero espero que mañana ya estaré en mejores condiciones.
Por de pronto me es indispensable decansar unas cuantas horas antes de poder escribir.
Expreso mis agradecimientos a la señorita Marielos Pineda, asistente de mi querida amiga Claudia Arenas Bianchi, directora de Comunicación de TACA, al señor Arturo Rueda, gerente en el aeropuerto y a la atenta empleada en esa terminal Mónica Chávez, por todas las amables atenciones que nos brindaron. Asimismo, agradezco a todo el personal a bordo del vuelo 211 que nos trajo de regreso a Guatemala, particularmente a la jefa de sobrecargos que se llama Sonia.
Si Dios no dice otra cosa, mañana volveré a estar en condiciones de poder escribir algo más sobre mis impresiones de viaje.
Muchas gracias por su generosa comprensión.

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