El sonado juicio que se está ventilando en el Juzgado Décimo Penal desde el viernes de la semana pasada contra los accionistas, directivos, funcionarios y empleados de Bancafé y Bancafé International Bank Ltd. se ha venido desarrollando con asombrosa lentitud, mientras las personas acusadas están apresadas en la incómoda y antihigiégina “carceleta” situada en el sótano de la Torre de Tribunales, al extremo que la audiencia a la que fueron citados estra mañana a las 8:30 horas, todavía no había comenzado a las 17:30 horas, porque el Juez Walter Villatoro no se había presentado, con el argumento que había tenido que ir a indagar a unos presuntos miembros de la banda de narcotraficantes denominada “Los Z”. Puede ser. No lo dudo. Pero, como se podrá comprender, esto significa que los accionistas, directivos, funcionarios y empleados del Banco de Café y Bancafé International Bank Ltd. no podrán salir libres o con medidas sustitutivas antes de la Noche Buena porque mañana será día de feriado para los juzgados. Lo cual mueve a sospechar que cabe la posibilidad que se esté incurriendo en RETARDO MALICIOSO contenido en el artículo 468 del Código Penal que dice textualmente lo siguiente: “El Juez que no diere curso a una solicitud presentada legalmente o que retardare, maliciosamente, la administración de justicia, será sancionado con prisión de uno a dos años, multa de dos mil a diez mil quetzales e inhabilitación especial de dos a cuatro años”. (El resaltado es propio)
Cualquiera con un poco de malicia puede sospechar que, debido a razones inconfesadas, los detenidos fueron apresados el viernes pasado para que tuviesen que pasar todo el fin de semana en la famosa “carceleta” y que el proceso se ha venido retrasando maliciosamente para que no puedan compartir las festividades de Pascua y Navidad con sus familias en el seno de sus hogares. Cualquier persona con dos dedos de frente y que sea un poco perspicaz podría sospechar que cabe la posibilidad de que alguna de las personas que perdieron mucho dinero cuando estaban especulando de manera avariciosa y arriesgada procurando ganar intereses más altos que los normales con los depósitos de su dinero en el banco off shore, que fue quebrado por disposición de la Junta Monetaria y la Superintendencia de Bancos esté detrás de todo esto y, con un malévolo espíritu vengativo, y se las esté arreglando de alguna manera ilícita, para que se venga retrasando el proceso con el propósito de que los detenidos sufran más tiempo en la carceleta o sean enviados a las cárceles “preventivas” de la zona 18, donde correrían el riesgo de ser denigrados y vejados.
No conozco personalmente al Juez Walter Villatoro, pero he tenido muy buenas referencias sobre él, tanto en lo personal como en lo profesional, de parte de personas que me merecen respeto y confianza, por lo cual me resisto a creer que pueda estar involucrado en esta trama, o por lo menos le doy el beneficio de la duda y espero que haga lo que sea necesario para no torturar más a esas personas.
Por otra parte, uno de los detenidos explicó a los medios de comunicación que ni los fiscales del Ministerio Público ni el juez son conocedoras de la materia bancaria, y estoy convencido de que así es. Puede ser que los fiscales sean excelentes investigadores y que el juez sea un legítimo justiciero, pero eso no significa, necesariamente, que estén enterados de los entreveros de las finanzas de la banca. Sería conveniente que el MP comprenda esto y que se haga asesorar por personas entendidas en la materia bancaria y que de ninguna manera estén involucrados en el caso.
Twitter @jorgepalmieri