1.- Aparatosa redada de militares retirados
Con un aparatoso despliegue de fuerza pública coordinado por la Fiscalía de la Sección de Derechos Humanos del Ministerio Público (MP), como si fuesen a capturar a peligrosos delincuentes fuertemente armados, el 6 del mes en curso fueron sorpresivamente aprehendidos en sus respectivas viviendas 17 ex altos jefes militares actualmente en situación de retiro: un grupo de 14 sindicados de estar involucrados en desapariciones forzosas entre 1981 y 1986 y otro grupo compuesto por militares acusados de la desaparición ilegal de Marco Antonio Molina Theissen, en septiembre de 1981.
El Juzgado de Mayor Riesgo A, a cargo de la juez Claudette Domínguez, autorizó los allanamientos a las casas y las capturas de 14 de los aprehendidos por una investigación de un caso que se remonta a la ejecución del “Plan de Sánchez”, en Rabinal, Baja Verapaz, el 18 de julio de 1982, donde se dice que tropas del ejército y expatrulleros de autodefensa civil (PAC) irrumpieron en la comunidad, torturando y asesinando a la población civil. Y para ello se basan en restos humanos que fueron encontrados enterrados en la base militar de Cobán. Sin atender la explicación de que ahí hubo un cementerio antes que se construyese la base militar.
Testimonios de sobrevivientes señalan que las torturas de las víctimas las ejecutó personal de la Dirección de Inteligencia del Ejército, en cuya unidad trabajó Byron Barrientos, quien entre 2000 y 2004 desempeñó el cargo de ministro de Gobernación durante el gobierno de Alfonso Portillo Cabrera.
La investigación del Ministerio Público (MP) señala que los detenidos habrían tenido responsabilidad en al menos 88 eventos relacionados con masacres entre 1981 y 1986, en el contexto del conflicto armado interno. Pero es evidente que se olvida que no fueron los militares quienes comenzaron la guerra fratricida, sino los guerrilleros marxistas entrenados en Viet Nam y en Cuba, con el propósito de adueñarse del país y establecer un regimen marxista. Y se olvida también que los militares no hicieron más que cumplir con el mandato constitucional de defender la institucionalidad de la agresión subversiva. Aunque después de perder la guerra, ahora los sobrevivientes de la guerrilla y sus tontos útiles viven clamando contra los militares y pretenden culparles de toda la Guerra sucia y de todo el inutil derramamiento de sangre que se produjo. Y las organizaciones de Derechos Humanos nacionales e internacionales tienen la tendencia de pretender cobrar cuentas solo a los militares, pero no a los subversivos que encendieron la mecha de la discordia. Olvidan también que la guerra no fue contra niños de primera comunion, sino contra un ejército irregular subversivo de ideología comunista, auspiciado y entrenado por el gobierno dictatorial de Cuba, que entonces estaba presidido por Fidel Castro.
La Fiscal general y jefa del MP, licenciada Thelma Esperanza Aldana Hernández, informó al pueblo por medio de los medios de comunicación que las capturas fueron solicitadas luego de la sentencia de 7 mil 710 años de prisión que un Tribunal impuso contra cinco expatrulleros civiles en marzo de 2012, por la masacre “Plan de Sánchez” que tuvo lugar el 18 de julio de 1982.
Los militares retirados detenidos son el general de brigada Manuel Benedicto Lucas García, ex Jefe del Estado Mayor del Ejército y hermano del ex Presidente general Romeo Lucas García, Byron Humberto Barrientos Díaz, Gustavo Alonso Rosales García, José Antonio Vásquez García, Carlos Humberto Rodríguez López, Ismael Segura Abularach, Pablo Roberto Saucedo Mérida, César Augusto Ruiz Morales, Édgar Rolando Hernández Méndez, Carlos Augusto Garavito Morán, Luis Alberto Paredes Nájera, César Augusto Cabrera Mejía, Raúl Dehesa Oliva, Juan Ovalle Salazar y Edgar Justino Ovalle, fundador de la organización Avemilgua, integrada por numerosos militares retirados y del partido politico que postuló la candidatura presidencial del licenciado en Administración de Empresas y actor cómico Jimmy Morales, actual Presidente Constitucional de la República. Pero este último no pudo ser detenido porque ha sido electo diputado y goza de inmunidad.
Los ex altos jefes militares fueron enviados a prisión provisional en la cárcel de la Brigada Mariscal Zavala, situado en la zona 17, y ya fueron escuchados el viernes pasado por el juzgado a cargo del proceso.
“Los casos que hemos documentado son crímenes de lesa humanidad contra la población civil, no combatiente, entre ellos niños”, señaló la Fiscal General, licenciada Thelma Esperanza Aldana, y agregó: es una “de las mayores desapariciones forzadas en América Latina”.
Sinceramente, creo que es una peligrosa provocación y un grave error volver a despertar la confrontación de 36 años de duración que en 1996 se creyó terminada con la firma del Acuerdo de Paz Firme y Duradera, al final del primer año del período presidencial de Álvaro Arzú (1996-2000). Me parece que esta actitud es como buscarle tres pies al gato, o picarle la cresta al gallo. No porque crea que vayan a reaccionar violentamente y pongan en peligro la paz en nuestro país, porque se van a levantar en armas los militares de alta que hoy conforman el Ejército, en mala hora diezmado por el nefasto gobierno de Óscar Berger Perdomo, y desarticulado por el desafortunado general retirado Pérez Molina al cancelar las bases militares que daban seguridad a diferentes áreas del territorio nacional; pero sí porque causa intranquilidad y zozobra en Guatemala, que ya tiene suficientes problemas con tratar de salir adelante del descalabro en que lo dejó el inconcluso período que lo gobernaron el general retirado Otto Fernando Pérez Molina y su controvertida pareja Ingrid Roxana Baldetti Elías.
- – La bella actriz Kate del Castillo y el actor Sean Penn
Se ha armado un escándalo mundial porque la bella actriz y empresaria tequilera Kate del Castillo, nacida en México pero estadounidense por nacionalización, y el famoso actor, director, guionista, productor y activista político norteamericano Sean Penn se reunieron clandestinamente con el tristemente famoso narcotraficante Joaquín Archivaldo Guzmán Loera, ampliamente conocido como “El Chapo Guzmán”, una de las personas más adineradas del mundo, con más de mil millones de dólares, según la revista Forbes, y, al mismo tiempo, el hombre más buscado del mundo acusado de ser “el capo” de los narcotraficantes y multi asesino confeso, mientras este andaba de nuevo prófugo de la justicia después de haber escapado asombrosamente de una cárcel de seguridad por medio de un túnel de más de un kilómetro de largo que va a terminar en una casa en construcción para disimular la difícil construcción artesanal del largo túnel.
Foto que ha dado la vuelta al mundo del actor Sean Penn dando la mano al
famoso narcotraficante Felipe Guzmán Loera alias “El Chapo”.
Ni lerdo ni perezoso, tras la nueva captura de “El Chapo” y el escándalo que armaron con la bella Kate del Castillo, Penn se hizo entrevistar por los periodistas del excelente programa dominical de la CBS, denominado “60 Minutos”, y confesó que cometió un error y no le había salido bien su “entrevista” al narcotraficante y asesino fugado, publicada en la popular revista “Rolling Stone” porque fue mal enfocada y solo sirvió al delincuente como caja de resonancia. Pongo entre comillas la palabra entrevista porque lo que se publicó no fue una entrevista sino una declaración de supuestas bondades del criminal a quien, evidentemente, se le caía la baba por la bella Kate, como se nos cae a todos los hombres que tenemos ojos para ver. Aunque, como en mi caso particular, si me dijera que sí me metería en problemas.
Twitter@jorgepalmieri