El próximo lunes 14 (y no necesariamente a las 14 horas, sino antes) se llevará a cabo primero la ceremonia de toma de posesión de los diputados al Congreso de la República electos para el próximo período de cuatro años de sesiones y la elección de los miembros de la próxima Junta Directiva de ese organismo y, después, la ceremonia de transmisión de la Presidencia y Vicepresidencia de la República, cargos que desempeñarán durante el siguiente período de cuatro años el ingeniero Álvaro Colom Caballeros y el doctor Rafael Espada, respectivamente, por haber sido electos por la mayoría de votantes en las dos vueltas electorales celebradas el 9 de septiembre y el 4 de noviembre del año pasado. Lo cual significa que ese día llegará a su punto final la mediocre gestión que tuvieron a su cargo el licenciado en leyes Óscar Berger Perdomo y el licenciado en Ciencias de la Comunicación Eduardo Stein Barillas, quienes indudablemente pasarán a la Historia de nuestra patria con ingrata recordación.
Al llegar a su fin el gobierno de Berger y Stein, si se hace un análisis sereno y equitativo tendremos que llegar a la conclusión que, lamentablemente, éste fue poco menos que mediocre, porque no deja nada que realmente justifique sus cuatro años a cargo de la Presidencia y Vicepresidencia de la República. Como no sea la reconstrucción de la terminal internacional aérea ?La Aurora?, que ha costado una respetable cantidad de millones de dólares y fue una concesión que recayó en uno de los hijos del presidente, pero éste la trasladó a un amigo suyo, el acaudalado hombre de negocios Gregorio Valdés, a quien no se identifica precisamente como constructor sino como vendedor de aviones y helicópteros.
Sospecho que si el gobierno entrante se llega a empeñar a investigar minuciosamente el multimillonario gasto que causó este meganegocio podría descubrir algunas anomalías que demostrarían que hubo corrupción. Como también es probable que la haya habido corrupción en muchos otros gastos, especialmente en el ministerio de Comunicaciones en la que presuntamente estuvieron involucrados los hijos y el yerno del presidente Berger apodado “La Ruca”. Por eso no debe de extrañar a nadie que Berger y Stein hayan cambiado de parecer o cosa parecida en lo que se refiere a ser diputados del Parlamento Centroamericano (Parlacen), pero no deben olvidar que los magistrados de la Corte de Constitucionalidad emitieron un dictamen declarando inconstitucional que los presidentes y vicepresidentes de la República se incorporen automáticamente a ese parlamento sin haber sido electos y que gocen de inmunidad.
Sin embargo, el gobierno saliente ha venido haciendo por todos los medios de comunicación una costosa campaña publicitaria para tratar de mejorar la imagen del gobierno actual y en especial del presidente Berger y tratar de convencer al pueblo de que su gestión fue positiva y productiva, pero no creo que haya logrado su propósito.
No obstante lo cual, El Periódico de ayer publicó en primera plana y en dos páginas centrales un reportaje firmado por Enrique Naveda (?) titulado ?Berger incrementa su popularidad? y subtitulado ?Detrás de Arzú y de De León Carpio, una encuesta ubica a Berger como “el tercer mejor Presidente de la democracia”. Pese a ello, la gente cree que no cumplió sus promesas?. En dicho reportaje Berger resultó ser ?el tercero mejor calificado?, con 5,7 puntos, después de los presidentes Álvaro Arzú Irigoyen con 6.8 puntos y el licenciado Ramiro De León Carpio con 6 puntos; y antes del licenciado Marco Vinicio Cerezo Arévalo, con 5 puntos, Alfonso Portillo Cabrera con 4.5 puntos y el ingeniero Jorge Serrano Elías con 3.4 puntos.
Hay que aclarar que a esos gobiernos se llama “democráticos” solamente porque han sido frutos de elección popular, salvo el de De León Carpio (alias “huevos tibios”) que fue electo por votación en el pleno del Congreso de la República para terminar el período que dejó a medias Serrano Elías cuando trató de imitar al presidente peruano Alberto Fujimori al disolver los otros dos poderes del Estado.
Según la ficha técnica, esta llamada “Encuesta Nacional en Guatemala” fue realizada en diciembre de 2007 por la empresa Borge & Asociados, por encargo de El Periódico, y fue una muestra entre 1,008 entrevistas a nivel nacional a mayores de 18 años, con margen de error de más o menos 3% y un nivel de confianza de 95%.
Cuando se preguntó específicamente ?¿Qué es lo mejor y lo peor de Óscar Berger??, el 32.1 por ciento de los encuestados dijo que ?las carreteras y obras?, pero el 9.1 por ciento dijo que ?nada?; el 4.1 por ciento le calificó de ?inteligente? (¡!); otro 4.1 por ciento dijo que ?ayudó al sector educación?; el 3.4 por ciento dijo que fue ?honesto?; el 3.2 por ciento dijo que ?ayudó a los pobres? (¿?); el 3 por ciento dijo que ?su carácter?, y el 8.9 por ciento dijo que otros. Y cuando se les preguntó que fue lo peor, contestaron: el 11.9 por ciento que ?no cumplió promesas?; el 8.4 por ciento ?no combatir la violencia?; el 6.2 por ciento que ?aumentó costo canasta básica?; 3.6 que ?no apoyó a los pobres?; el 3.1 por ciento que ?no tiene carácter?; el 2.6 por ciento que ?no se preocupa por el país?; el 2.5 que ?no tiene capacidad? y el 20.6 por ciento que otros.
También se preguntó ?¿Quién fue el mejor funcionario de la administración actual?? y el resultado fue que el 58.4% no supo que responder; el 24.2% dijo que ninguno; el 9.5% que fue la ministra de Educación; el 6.8% que otros; el 1.1% que la ministra de Gobernación.
Esta curiosa ?evaluación? demuestra que hay muchos guatemaltecos que no saben nada de la realidad nacional, y que por lo menos el 4.1 por ciento parece que no vive en el país o no sabe lo que significa ser inteligente y otro 4.1 por ciento no tiene ni puñetera idea de lo que es ayudar a los pobres, ya no digamos a los muchos compatriotas que viven en la más cruel miseria.
En contraste
En el diario Prensa Libre también de ayer se publicó en primera plana una fotografía de buen tamaño de la esposa del presidente Berger señora Wendy de Berger, a quien cataloga como ?personaje del año 2007? y con el titular ?Importante labor social y reconocimientos internacionales la distinguen?. Más de tres páginas interiores le dedicaron a un reportaje en dos partes del reportero César León, titulados: ?Gran protagonismo, gran discreción? y ?Wendy Widmann de Berger: una dama de primera?, que consiste en una biografía fotográfica desde que tenía 6 años de edad hasta que el 14 de anero del 2004 felicitaba con un beso en la mejilla a su esposo cuando tomó posesión como presidente, y otra foto familiar con sus nietos y las bisabuelas Lulú y Carlota, pasando por cuando bailó el ballet Hansel y Gretel en el colegio, después cuando celebró su primera comunión en mayo de 1955, luego cuando se graduó en 1962, después cuando acompañaba a su esposo cuando fue operado de la próstata en un hospital de Nueva York en el año 2003.
Nadie podría negar que esta distinguida señora merece tanta cobertura de Prensa Libre, o de cualquier otro periódico, ni podría decir que no se justifica tanta atención periodística. Desde la campaña electoral de su esposo, este columnista expresó que ella es una mujer que, en contraste con su esposo, además de ser inteligente tiene una buena disposición para desarrollar trabajos de servicio social. Sólo una persona demasiado desconfiada y maliciosa podría atreverse a sospechar que en algo influyó para que le dieran tanto espacio el hecho que el director editorial en ese medio de comunicación es el periodista Gonzalo Marroquín Godoy, quien está felizmente casado en segundas nupcias con la encantadora señora Melita Widmann, hermana menor de la homenajeada Wendy, quien al final de los cuatro años del período de su esposo puede irse tranquila y satisfecha a su casa y a sus actividades personales, porque deja un excelente recuerdo por el discreto papel que desempeñó como “primera dama de la nación”. A diferencia de su esposo “el Conejo”, quien el lunes 14 a las 14 de la próxima semana dejará la Presidencia de la República con más pena que gloria. Y por eso hace bien en no querer permanecer en el lugar donde se desarrollará esa ceremonia mientras el presidente entrante lea su discurso. Creo que hace bien. Eso se llama en términos teatrales “hacer mutis por bambalinas”. Y esto no siempre sucede con aplausos del público, sino con una rechifla general, como ocurre en este lamentable caso. Pero gracias a Dios que hará entrega del gobierno para irse a cuidar a los marranos y sus vacas en la finca de su esposa, o en la propia que heredó de su papá.