Tres de los medios impresos más importantes del país destacaron desmesuradamente ayer la firma del “pacto de no agresión” y la intención de mantener transparencia en los fondos de campaña y guardar la educación y compostura adecuadas de los partidos políticos que anteayer firmaron ios secretarios generales de 21 de los 25 partidos políticos inscritos en la Plaza de la Constitución. Concretamente, los secretarios generales de los partidos políticos se comprometieron a lo siguiente:
> Respetar la Constitución, la Ley Electoral y de Partidos Políticos y sus reformas y el ordenamiento legal vigente
> Coadyuvar a garantizar la pureza del proceso electoral desde el ámbito de nuestras responsabilidades
> Colaborar con el Tribunal Supremo Electoral a efecto de que las elecciones sean una muestra de civismo, patriotismo y garantía del Estado de Derecho y a reforzar a esa máxima autoridad electoral en su quehacer.
> Emprender una campaña electoral centrada en valores y principios democráticos.
> Denunciar de inmediato la propagación de campañas de desprestigio apócrifaa o “campañas negras”, a fin de deducir las responsabilidades civiles y penales que correspondan.
> Promover activamente la divulgación de programas y planes de gobierno locales y nacionales, así como el debate de éstos entre los aspirantes que los impulsen.
> Evitar el uso directo o indirecto de los recursos públicos a favor o en contra de cualquier organización política o candidato.
> Adolptar los mecanismos necesarios para que los principios y compromisos éticos electorales sean conocidos y respetados por nuestras bases.
> Entregar mensualmente al TSE el listado completo de donaciones recibidas para la campaña electoral, identificando donante y monto de la donación (si se trata de donaciones en especie, el monto será estimado a valor mercado), así como entregar mensualmente al TSE el listado de gastos de campaña incurridos en el período, indicando proveedor, concepto y monto del gasto.
La pregunta que se hace el pueblo es: ¿para esto les fue indispensable firmar un “pacto ético y de no agresión”? ¡Qué vergüenza! ¡Aliviados estamos! ¡Qué calidad de dirigentes políticos son los que se disputarán la Presidencia de la República! Y sin embargo, es dudable que estas cláusulas se vayan a cumplir. ¿Quién no va a comprometerse públicamente a cumplir con lo que estipula la Constitución de la República? ¿Quién podría dejar de aceptar que no va a jugar sucio? ¿Quién podría decir que no va a decir la verdad sobre los fondos que reciben y que gastan?
El diario Siglo Veintiuno publicó lo siguiente:
El titular principal de la portada, a cuatro columnas: Optimismo tras firma de pacto. Y como subtítulo > Analistas y políticos guardan esperanzas de que convenio permita que se realice campaña en paz, civilizada y con menos impunidad.
Esta es la fotografía que Siglo Veintiuno publicó en la portada de su edición del martes 9 del mes en curso, con el siguiente pie:
LO SIGNARON. Secretarios generales de 21 partidos se reunieron en la Plaza de la Constitución para suscribir un acuerdo político de no agresión, promovido por las autoridades del Tribunal Supremo Electoral. Representantes de cuatro organizaciones no asistieron.
En la página 3 el titular a cinco columnas dice Analistas y políticos están optimistas por pacto ético. Y los subtítulos
>Acuerdo de no agresión fue firmado en la Plaza de la Constitución por 21 secretarios generales.
>Magistrados del TSE y las iglesias serán garantes del compromiso suscrito por las entidades políticas.
Por Manuel Hernández. Siglo 21
ACUERDO. Los secretarios generales de 21 de los 25 partidos inscritos en el TSE firmaron el pacto ético.
Con el objetivo de impulsar una campaña de altura, transparente y que fomente la participación ciudadana, 21 secretarios generales de partidos políticos inscritos en el Tribunal Supremo Electoral (TSE) firmaron el pacto ético y de no agresión, lo cual fue tomado con optimismo por analistas y los signatarios del documento.
El acto se realizó en la Plaza de la Constitución, y el cumplimiento del pacto ético será vigilado por los miembros del TSE, así como las iglesias Católica y Evangélica. Quienes infrinjan el acuerdo serán amonestadas con un llamado de atención en público.
El director de Acción Ciudadana, Manfredo Marroquín, calificó de positiva la firma del pacto. “Lo veo como un buen gesto, algo positivo en medio de una campaña que ya ha tenido mucho de negativo, como el irrespeto a la Ley electoral y una campaña anticipada”, expuso. A decir de Marroquín, la firma “renueva un poco la esperanza de tener una campaña más civilizada, no tan llena de impunidad y de violencia. Faltará ver que esas buenas intenciones se traduzcan en hechos concretos”.
José Dávila, director de la coalición Civismo Electoral 2011, indicó que “es un paso importante al que deberá seguir el estricto cumplimiento por parte de los partidos”.
El director adjunto del Instituto Centroamericano de Estudios Políticos (INCEP), Marco Antonio Barahona, también ve con buenos ojos la propuesta al señalar que “es un esfuerzo que recuerda a los partidos políticos que existe un marco legal que hay que respetar”. Añade que la sociedad podrá reclamar a los políticos “coherencia con lo suscrito”.
El doctor Gustavo Berganza, director de la Fundación DOSES y columnista de elPeriódico también califica de positiva la firma del documento, porque “les da la oportunidad a los partidos políticos de un referente para formar su conducta electoral”.
La embajadora de España, Carmen Díez Orejas calificó la suscripción del documento como un “mensaje de tranquilidad”
La presidenta del TSE, doctora María Eugenia Villagrán, señaló que el pacto busca que el proceso electoral transcurra en armonía, “que ejerzan una campaña de altura, enfocada en sus planes de gobierno comprometiéndose con la transparencia y alejados de ejercer cualquier iniciativa que promueva la agresión o la violencia”.
Los firmantes
La diputada Roxana Baldetti, secretaria general del Partido Patriota, indicó: “Qué bueno que tengamos este pacto. Es lo mejor que nos pudo haber pasado, porque no es a nosotros a los que nos tiene que fiscalizar, sino es al partido oficial el que tiene todos los recursos”.
Jairo Flores, secretario general del partido Unidad Nacional de la Esperanza, indicó que no pondrían atención a los señalamientos.“No vamos a responder. Lo que queremos es dar una muestra de un gran trabajo y de ejemplo”, resaltó.
El alcalde de la capital Álvaro Arzú Irigoyen, ex Presidente de la República, Secretario General y aspirante a candidato presidencial del Partido Unionista, no llegó a la cita y por lo tanto no firmó el documento.
En el diario Prensa Libre publicaron el titular Partidos políticos suscriben pacto ético y de no agresión y abajo esta fotografía:
Los secretarios generales de 21 de los 25 partidos políticos inscritos en el Tribunal Supremo Electoral (TSE) suscribieron ayer un pacto ético y de no agresión., de cara a la campaña proselitista que culminará con los comicios de septiembre próximo. Entre las agrupaciones que no firmaron el acuerdo se encuentra el Partido Unionista, que dirige el alcalde capitalino Álvaro Arzú. El compromiso carece de instrumentos para obligar a su cumplimiento, pero establece que será vigilado por los magistrados, la Conferencia Episcopal y la Alianza Evangélica.
Y en la página 2 hay el siguiente reportaje:
Elecciones. Ayer, 21 de 25 organizaciones firmaron acuerdo.
Partidos políticos suscriben pacto cuestionado
Por Karen Cardona y Geovanni Contreras
Entre dimes, diretes y un ambiente poco amigable, los partidos políticos firmaron ayer un pacto ético político con el Tribunal Supremo Electoral (TSE), en el cual se comprometen a no agredirse, pero los analistas ponen en duda la moral de los dirigentes.
Los secretarios generales de 21 de los 25 partidos inscritos en el TSE se dieron cita en la Plaza de la Constitución para firmar aquel documento.
Roxana Baldetti, del Partido Patriota (PP), evitó a toda costa cruzar miradas con Jairo Flores, secretario general del partido Unidad Nacional de la Esperanza (UNE), agrupación a la cual acusó de haber intentado sabotear la reunión efectuada el domingo último en el foro Mundo E.
Manuel Baldizón, de Libertad Democrática Renovada (LÍDER), llegó acompañado de simpatizantes que vestían camisolas con el símbolo de su partido, lo que generó críticas en voz baja del resto de políticos presentes sobre la falta de respeto al compromiso.
¿Tienen moral los partidos?
Sebastián Mariñas, del Partido Nacional, de Uruguay, aseguró que en su país, como en Brasil, Ecuador y Argentina, los partidos nunca han firmado un pacto ético previo al proceso electoral, porque es una práctica de “las democracias débiles”.
“Los partidos, en sí mismos, se supone deben albergar la ética como un tesoro preciado. Firmar un pacto es algo degradable, porque en todo momento el electorado debería preguntarse hasta dónde están diciendo lo que realmente piensan o sienten”, refirió Mariñas.
José Dávila, de la coalición Civismo Electoral 2011, expuso: “La suscripción del pacto es una esperanza para que se efectúen unos comicios en paz, con tranquilidad, con debates de altura y sin agresiones, y es además un factor que podría mejorar la imagen y credibilidad de los partidos políticos”.
Yesenia Álvarez, fundadora y presidenta del Instituto Político para la Libertad, de Perú, explicó que en ese país los partidos firmaron un pacto ético días atrás, pero también incluye un tribunal de honor del pacto.
No obstante, expuso que tanto el acuerdo como el tribunal “son mera formalidad, porque todos hacen lo que quieren” durante el proceso electoral.
Señalamientos nunca faltan
Después de firmar el pacto, Baldetti dijo que el compromiso público y moral es necesario para que el partido oficial se abstenga de utilizar recursos públicos para la campaña.
“Ellos tienen el dinero, los empleados, los carros y todos los recursos para hacer campaña; nosotros no”, enfatizó.
Flores intentó ignorar las acusaciones, pero al preguntarle al respecto refirió: “Nosotros no vamos a entrar en confrontación. Estamos dispuestos a cumplir con el pacto ético y con la Ley Electoral porque Guatemala se merece unas elecciones limpias y una campaña de altura”.
Jaime Martínez, de la Gran Alianza Nacional (GANA), afirmó: “Hay que reconocer, y no podemos tapar el sol con un dedo, que hemos incumplido, tal vez unos más que otros, pero hoy estamos comprometidos a cumplir”.
Harold Caballeros, del partido Visión con Valores (VIVA), y Héctor Nuila, de la Unidad Revolucionaria Nacional Guatemalteca (URNG), coincidieron con la opinión de Martínez.
A la firma del acuerdo no asistieron delegados de los partidos Unionista, Libertador Progresista, Socialdemócrata Guatemalteco y de Bienestar Nacional. (Fin del reportaje)
Los secretarios generales que no asistieron a la firma del “pacto” fueron: Álvaro Enrique Arzú Irigoyen, del Partido Unionista (PU), Dr. Carlos Alfonso González Quezada, por el Partido Social Demócrata Guatemalteco (PSDG), licenciado Acisclo Valladares Molina del Partido Libertador Progresista (PLP) y Ridel Reyes Lee por el Partido Bienesestar Nacional (BIEN)
El único de los tres diarios más importantes del país que no le dio mayor importancia fue elPeriódico, porque se limitó a publicar en la página 5 esta fotografía con el pie de foto explicativo:
Felicito a mi estimado amigo y colega Juan Luis Font, director de elPeriódico, y a la codirectora de ese diario, periodista Sylvia Gereda de Torrebiarte, por haber dado a esta información la dimensión que merece y no haber caído en la trampa de darle una importancia que realmente no tiene y de lo cual Guatemala debería avergonzarse. No es mi intención menospreciar a las personas que lo firmaron, pero lamento que lo hayan hecho con lo cual aceptan la posibilidad de que en el proceso haya ilegalidades, dinero mal habido, campañas negras, calumnias, difamaciones y las habituales mentadas de madre. ¿Es que estos candidatos presidenciales son hipócritas, ingenuos o cínicos? ¡Muy pronto lo comprobaremos!
Mientras tanto, reconozco que es alentador, en efecto, que estos nuestros políticos –con el respeto al que se hagan acreedores– sean capaces de juntarse a verse las caras… aunque se dice que la guapa señora Roxana Baldetti, ya proclamada candidata a vicepresidenta de la República, acompañando en la papeleta al general Otto Pérez Molina, candidato presidencial del Partido Patriota (al cual se le reconoce lo impresionante que fue su reciente reunión de secretarios generales del interior de la República, en ningún momento vio a la cara a Jairo Flores, sin duda uno de los más capaces y poderosos dirigentes del partido en el gobierno del ingeniero Álvaro Colom Caballeros, esposo de la señora Sandra Torres de Colom, candidata a la Presidencia de la República por ese partido, si es que logra manipular las cosas para que lleguen a magistrados de la Corte de Constitucionalidad (CC) los suficientes magistrados que le sean favorables y encuentren alguna misteriosa fórmula para justificar que ella pueda ser la próxima y primera Presidenta de la República. Hay muchos que al oír plantear esa posibilidad dicen en coro “¡Dios nos coja confesados!” Son muchos los temores de muchas personas que creen que ella podría ser una gobernante con muchos resentimientos y con temible capacidad dictatorial. Pero volviendo al tema del “pacto de ética” que firmaron los secretarios generales de 21 de los 25 partidos políticos prometiendo que no van a jugar sucio en los próximos meses. ¡El poder es algo tan codiciado por unos y por otros! Y dictadorcitos desorientados y sediendos de todo el poder como el insoportable dictador de Venezuela, comandante Hugo Chávez, cuyo mal ejemplo siguen el presidente de Nicaragua Daniel Ortega, el presidente ecuatoriano Rafael Correa, el presidente boliviano Evo Morales y Cristina Kirchner –la “reina Cristina”–, viuda del ex presidente Néstor Kirchner, de la República Argentina. Y algunos creen que si “la doña” (como muchos le dicen a doña Sandra) pudiese alcanzar la Presidencia de la República, es indudable que seguiría esos mismos pasos. ¡A saber!
Todo esto viene a cuento –perdonen si divago un poco–, es porque sospecho que habrá mucha gente en el mundo que se estará riendo a carcajadas de lo ridiculo que es que en un país como éste, supuestamente en vías de desarrollo, la mayoría de los periódicos puedan dar tanta importancia a un hecho tan primario, tan absurdo, tan ridículo (que los protagonistas me perdonen) como es jurar que van a comportarse bien y prometer que van a tratar de ser decentes. ¡Vaya vaya! ¡La Patria está a salvo! ¡Aleluya!